Treinta y Tres 3 ( José Denis y Wiltón Mieres X 2) Peñarol 0.Sin despeinarse
Por Juan R. Silva
Treinta y Tres le ganó sin despeinarse a un Peñarol golpeado por otro infortunio, esta vez la fractura de peroné que sufrió el delantero Emiliano Diago, una o la más prometedora figura que alinean los dirigidos por Oscar Arada.
A los 5 minutos del primer tiempo la lesión del delantero aurinegro, la segunda que sufren los carboneros en este año, la primera fue la de Juan Tristant y la tercera de importancia porque hace un par de fechas también se quebró Nolberto Aquino, en una sucesión de lesiones que hace dos o tres años han aumentado de forma importante y que merecería el estudio de cuáles son las causas.
Lo cierto es que luego de que se tuviera que esperar nuevamente la ambulancia, esta vez fue más rápido la respuesta, pero igual había disconformidad entre los jugadores, el delantero juvenil fue trasladado al Hospital local.
Luego de esto Peñarol sintió indudablemente en lo emotivo y en la concentración y recibió dos goles casi seguidos por no decidir si salía a “achicar” el espacio entre defensas y volantes o si se quedaba a
esperar los delanteros rivales.Una muy buena definición de José Denis haciendo pasar a su marcador y definiendo de zurda al palo más lejano y una jugada donde el mismo Denis, venciendo la ley del offside que trataba de aplicar Peñarol, asiste a Wiltón Mieres y la definición de este al medio del arco, le dieron al decano la tranquilidad que precisaba.
Antes de esto solo un cabezazo desviado de Raúl Arismendi a la salida de un tiro libre, clara chance de gol desperdiciada por el mirasol, había marcado lo que podía pasar si Peñarol aprovechaba mejor la pelota quieta.
Y después de los dos goles en un par de veces Peñarol repetía los córner porque no mostraba mucha seguridad la última línea decana pese a que Martin Alzugaray hacía sentir su vos de mando.
Dos tiros desde lejos tratando de aprovechar el viento a favor fueron las ultimas oportunidades albas en el primer tiempo.
El segundo tiempo paso a el trote porque Treinta y Tres decidió no apretar el ritmo de juego conforme con los dos goles de ventaja y simplemente tratando de dosificar el esfuerzo y economizando las energías.
Contó con la ayuda de un Peñarol que salvo alguna maniobra individual de Arismendi o Becerra y la lucha continua de Cosio, no podía generar peligro ante el arco de Maicol Silvera.
Marcelo Goldaracena mostrando seguro y atajando un par de tiros de Yari Silvera, mantenía la expectativa de cuándo llegaría el tercer gol decano, que llegó luego de un saque de costado de Gonzalo Lemes, que cayó en el medio del área
ante la sorpresa de la línea de tres aurinegra y la definición de Wilton Mieres fue demasiado fácil. Y fácil fue el trascurrir del partido porque Peñarol sabía que no podía y Treinta y Tres no quería.Se fue así un partido olvidable que solo recordaremos porque Treinta y Tres mantiene la punta de la anual y con un partido menos está ahí en el Clausura y sobre todo desafortunadamente porque fue el partido que se quebró Emiliano Diago.
Agachadita !!! La violencia del disparo de Yari Silvera, obligó a las flexiones del árbitro De Souza.
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