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Justicieramente Por Juan R. Silva
El globito se prendio mínimamente en la lucha por el campeonato, pero se prendió.
Porque Huracán tiene el plantel como para estar arriba eso nadie lo duda, pero no ha podido a lo largo de “este corto” campeonato, que el mismo diseñó y después renegó, articular, el muy buen capital individual con una propuesta colectiva que se mantenga por lapsos prolongados en un partido, es mas ante Vaca Azul lo hizo muy intermitentemente.
Pero en este partido ante Deportivo, un cuadro que arrancó para ser la revelación del campeonato pero al que, por un tema físico y de plantel corto, al contrario que a los albos este campeonato Clasificatorio ya se le hace largo.
Porque además el portuario agranda el margen de error, como no teniendo conciencia lo que se esta jugando o quizás como me dijo “un baquiano” en las cabecitas “ribereñas”, ellos son así para su bien y para su mal, capaces de darle vuelta corriendo un partido a Lavalleja y empatarle y capaces de largarse en moto y llegar 5 minutos antes de comenzar un partido.
Y acá ante un equipo que esta por lo menos organizado ese agrandar el margen de error le salio mal, porque de arranque un centro mal el arquero Romero que da un rebote y Manuel Cosio, que fiel a su estilo, vino de atrás de todos, calladito y con bajo perfil y fue de lo mejor del albo en este partido, abrió la cuenta.
Casi sin hacer nada Huracán tenia solucionado el tema de la urgencia, Deportivo no podia cerrarse y eso ante un equipo que tiene buena técnica y conoce de fabricar espacios y explotarlos, como es Huracán es casi suicida. Pero en el primer tiempo el globito no encontró la forma, aun en formación su idea futbolística, que no es muy clara tampoco, mas bien intenta ser “un camino del medio”, le dio alguna oportunidad a Deportivo.
Y la gran jugada individual de Pereira, tres en el camino, se pierde apenas afuera.
Pero además y esto es un apercepción personal a Huracán lo confunde su mismo contexto, porque cuando no hay protestas y se dedica a jugar juega bien, pero una y otra vez invariablemente “cae” en querer “ganar de boquilla” y eso lleva que algunos jugadores “se les salte la cadena” y se pongan al borde de la expulsión, digo yo ganaba 1 a 0, lo tenia controlado jugando, porque entrar en el roce y la protesta que justamente beneficia al que plantea eso, ese protagonismo de torcer la voluntad o no de los jueces lo sacó del partido.
Aun así era grande la diferencia de procedimientos, porque Rodrigo Alfaro que tácticamente jugaba un buen partido generaba espacios y habilitaciones que por ejemplo terminan con un gran tiro de distancia de Cosio que devuelve el travesaño.
Y cuando conseguía “sintonía” sobre todo con Simón Mier, una pared bárbara que el delantero define afuera, el gol prácticamente se caía. Incluso Alfaro mismo tiene una chance mas, cara a cara con Romero y su disparo se pierde apenas afuera dentro del área chica con perfil de derecha
Pero las tarjetas, las protestas, el griterío, vos sabes que algún día alguien me va a tener que decir o contar cual fue el partido que Huracán ganó “de afuera”, porque mira que lo he visto perder varios pero ganar protestando?... mira que no encuentro.
Las tarjetas decía se llevaron puesto a Luca Fernández el joven y prometedor lateral derecho albo que fue subrogado porque su tercer expulsión en el año era inminente.
Y acá fue inteligente el técnico Mier porque también Niz había mandado a la cancha al hábil zurdo Gasañol justamente para aprovechar esa debilidad rival pero además encontró en Anderson Coronel un argumento para el segundo tiempo que Huracán no había usado en el primero.
Porque en esa segunda parte el albo uso el ancho completo de la cancha del Parque Colón, los 70 metros de lado a lado y en ese lapso fue muy superior, porque el ribereño quería jugar de área a área y en el espacio que sobraba, tanto Perdomo como el mencionado Coronel eran “un free pass”.
Y un desborde de Mari Perdomo cede a Alfaro que erra un gol muy claro.
Y ahí apareció el Depor que conocemos, sin darse por vencido ni aun vencido, con argumentos mucho mas forzados que Huracán, mucho mas confusos, pero para ellos validos igualmente, pared Pereira – Ricardi que termina con un cierre de Rodrigo Taran que era el único albo que aguantaba el “cimbronazo físico” que proponía Charqueada, porque el ribereño tenia y no podía solucionar un problema interno importante porque Arnaud, su referente, capitán y goleador era evidente que esta tarde no tenia “onda” con los mas chicos..
Rodrigo Alfaro, un tipo persistente verdaderamente, pese a errar un par de chancees anteriormente, seguía llevando peligro y exigiendo a “los gordos” zagueros amarillos y cuando logra convertir, su tanto es anulado por offside, pero decía que quizás o no, genéticamente seguía porfiando y luchando el delantero buscando el segundo tanto albo.
Perdomo se pliega a su compañero y prácticamente debajo del arco de Romero eleva una oportunidad clara también.
Seguía porfiando y atacando Alfaro que define bien, entrando pasado pero no era su tarde, se va desviado su tiro.
Y la ansiedad empieza a apurar a los albos, reclaman un penal con un rival de espaldas a la jugada, era tan intenso su dominio y tan desesperante que no se rubricara que ya empezaba a molestarse el equipo hasta con sus propios hinchas, solicitándoles silencio con ampulosos gestos.
Pero al expulsión tonta de Silva, uno de los dos que se vinieron en moto, le dio esa tranquilidad que los goles no le daban, porque Huracán jugó bien, moviendo el balón de banda a banda, con Alfaro repito siendo importantísimo en la fabricación de espacios y haciendo correr de lado a lado, siempre tarde a Charqueada.
Deportivo intento fiel a su bravura e idiosincrasia, un avance con Figuera yendo para adelante como un tren con albos que se “abrían” ante su paso a lo toro, pero Rodrigo Taran llego antes y despejo.
Y de Pronto a instancias del empuje de Figueras principalmente, Charqueada rodeó a Huracán, ganando trancazos y dándole la pelota a Pereira y Gasañol, muy hábiles, tan hábiles como improductivos.
Y ahí volvimos a ver al Huracán inteligente y preciso, de contra, gran habilitación para Rodrigo Alfaro, el delantero la eleva por sobre la desesperada salida de Romero, era gol por todos lados, menos por el travesaño, ahí rebotó el balón, el gol no quería nada con Alfaro pero si con Simón Mier que llegaba acompañando la jugada, 2 /0 partido terminado.
Simón Mier cierra el partido, Rodrigo Alfaro no puede creer su mala suerte.
Los cambios desordenaron a Deportivo, Figuera se fue de nueve y la pelota no le llegaba, quedo con Pereira de último y Huracán no pudo encontrar esa asistencia sino era mas seguro el tercero que descontara el ribereño.
Y así termino el partido, con las expulsiones de Cristian Ramírez y de ¡Anderson Coronel! como echo anecdótico.
Huracán se metió en la pelea, con poquitisimas posibilidades y dependiendo, ¿dependiendo de otros resultados? Si, dependiendo de otro resultados, lo cierto es que quedo a 5 de San Lorenzo y a 6 de Lavalleja pero San Lorenzo tiene que jugar con el todavía y Lavalleja tiene un partido mas y a 3 de Treinta y Tres y tiene que jugar con el y a 2 de Yerbalense pero, en este campeonato Clasificatorio cualquier cosa puede pasar… ¿o no?
Arbitraje:
Gustavo De Los Santos, Bien (6) sin grandes contratiempos, no tuvo jugadas complicadas, bien en el manejo de las tarjetas.