Juveniles
Un paso atrás? Por Juan R. Silva
18- 1-12
Melo 3-1 Treinta y Tres
(Carlos Fernández 38, 62, Juan Arrospide 48 - Braian Silvera 83)
El futbol siempre tiene determinadas máximas que después uno ejecuta como lugares comunes y con las que tratamos de facilitar una definición, en este caso nada mas apropiado a lo que se vio este miércoles en horas de la tarde noche en el estadio Ubilla de la ciudad de Melo.
El partido tuvo un momento determinante en una decisión equivocada del réferi.
Porque desde el comienzo de la brega hasta que el arbitro riverense Ciro Camargo cobra el penal de forma totalmente equivocada, con una interpretación muy alejada de las ultimas recomendaciones del comité arbitral de FIFA que dice que la intencionalidad , si bien es potestad del árbitro otorgarla, deberá tener en cuenta la situación, es decir que si hay un rebote muy corto por ejemplo es imposible por un tema físico retraer el brazo o la mano y este claramente fue el caso, un tiro sin pretensiones del zurdo que golpea en Nicolás Olivera que estaba marcando, se desvía el balón bruscamente y da en la mano de Carlos Fuentes, tan es Asia la inseguridad en el cobro de la falta del arbitro que ni siquiera amonestó al zaguero rojo.
Antes de eso penal Treinta y Tres había desperdiciado dos ocasiones muy claras en los pies de Robert Piriz y había dominado claramente el partido.
El triangulo que conformaban Nando Acosta , Luis Fernández y Rodrigo Segovia, si bien no con mucha claridad pero recuperando muchos balones y jugándola sobre todo el Nando con criterio y mucha precisión, habían echo que en esa primera parte de la etapa inicial la Rojita fuera mas que su rival el local que prácticamente no había inquietado a Pablo Cuenca.
Pero la decisión de Camargo, equivocada en la interpretación, le dio la posibilidad al moreno Fernández de abrir el score y de afiatar sobre todo la confianza de los arachanes.
Y la etapa inicial se fue con los rojos ya no llegando tan clarito, sintiendo la ventaja rival afirmados defensivamente en la defensa que lidera Carlitos Fuentes de forma totalmente concentrada y los melenses un poco mas confiados y con presencia amenazante de Carlos Fernández.
El segundo momento importante de este tercer partido de los dirigidos por Dardo Pereira llega a los 2 minutos de la segunda parte, “de los vestuarios”, un terrible zapatazo de Juan Arrospide, el lateral izquierdo que a fuerza de una vitalidad física que impresiona e impacta para la edad, había contenido adecuadamente a Guzzi Furtado uno de nuestro volantes laterales, el con mas despliegue sobre el costado derecho, Juan Arrospide entonces pone el 2 a 0 , que le dio a los locales la tranquilidad necesaria.
A partir de ahí una serie de vicisitudes impactaron la confianza y el orden que el elenco olimareño debió tener.
Claramente la lesión de Luis Fernández fue la mas importante porque el equipo se quedo táctica, física y anímicamente sin el termómetro del equipo y porque “Nando” Acosta que fue el mejor jugador en el correr del partido, debió retrasarse mas un y ya nos quedamos con una opción ofensiva sola, la potencia descontrolada de Robert Piriz que en ese lapso de tiempo mostró la acostumbrada agresividad del delantero albo.
El gol de cabeza de Carlos Fernández solo sirvió para confirmar que somos demasiado “ingenuos” en el juego aéreo y el descuento de Braian Silvera, tras una “apretada” de Robert Piriz para “decorar” un resultado que fue ajustado a lo visto, claro si tomamos en cuenta que todo nace de un error del árbitro.
Triunfo agachan y derrota olimareña, La Rojita sigue teniendo la clasificación en el bolsillo y ahora deberá analizar que es mas inteligente, el lugar común que dice “que para ser campeón hay que ganarle a todos” o la sentencia fácil de “el futbol es pa los vivos, hay que elegir rival”
A nosotros, humildes escribas del futbol del pueblito que se quedo a dormir al lado del rio, con respecto a esto solo nos queda decir las palabras del filosofo montevideano Pato De la Mata “cada uno hace de su historia futbolistica, una bicicleta y se la presta al que quiere”
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