Otra Vez
Por Juan R. Silva
Que difícil fue armar este comentario, dicen los libros que cuando se pierde (este empate fue una derrota, por los puntos y por la forma) lo mejor es dejar pasar un tiempo para poder aquilatar el resultado y el análisis.
Treinta y Tres pese a no jugar bien, desmerit
o propio y merito mucho de Rocha y su planteo estratégico, tuvo una buena oportunidad de pegar primero e ir a Rocha no cómodo pero si con ventaja.
Porque además de no tener ahora la ventaja del resultado a favor deberá anotar en su visita pues recibió una diana en casa, pero lo más doloroso en su estado de ánimo es sin dudas la forma: empate sobre la hora, como local y producto de una dolorosa mezcla de desconcentración, miedo escénico y mala suerte.
Sin dudas el análisis subjetivo del hincha buscara la explicación en un juez que incidió poco y nada, capaz que si lo miras bien a favor de los rojos, porque en la adición estuvo perfecto, en las expulsiones hasta creo que nos benefició y nos cobró un penal a favor, ¿que mas queríamos?.
Otro análisis podría ser, también en la subjetividad, la suerte que se le puede achacar al equipo celeste que la ha tenido es cierto pero que la ha ayudado mucho con planteos totalmente acertados y sobre todo con un racionamiento de sus recursos humanos realmente eficaz producto de un técnico estudioso y trabajador que es claro no desprecia para nada el análisis del rival y en eso se ha hecho fuerte, no olvidemos que Rocha está invicto, nos empato acá, nos ganó allá merecidamente y le ganó también de visita a Melo, algo y ya lo dijimos, tiene.
Y solo a modo de ejemplo digamos que Rocha debía suplir acá la falta de Luis Maguregui y Roberto Pioli, dos de sus más emblemáticos, sino los más, jugadores del elenco de Bitavares, y lo hizo de tal manera, plantando una figura táctica adecuada y “muy corta” entre las líneas que realmente fue eficaz.
Rocha mostró desde el principio un 4/2/3/1, con una media cancha “gorda” que ponía continuamente en el primer tiempo a 8 jugadores celestes por detrás de la pelota y a Jorge Brañas “flotando” entre el medio juego y el ataque con una punta definido solo.
Esa posición de Brañas fue un elemento determinante en el primer tiempo, porque la línea de tres defensiva roja no sabía que hacer, si salir lejos a buscarlo Taran o quedarse y esperar que alguno de los contención o Graví o Alzueta lo tomara.
Jorge Brañas que es un buen jugador, comenzó a partir de esa libertad a tener precisión y confianza y literalmente “durmió” el primer tiempo, porque los rojos no encontraban forma de vulnerar el cercado defensivo celeste y después tampoco encontraban a Brañas y su tenencia.
Porque Treinta y Tres cuyo técnico se ha definido como “más preocupado por lo nuestro que por lo del rival", plasma “lo nuestro” como tener la pelota con muchos toques laterales, con poca o nada verticalidad, pero afirmado en el trasporte de José Denis o Yari Silvera y eso Bitavares lo sabe bien y cada vez que estos dos jugadores tenían el balón, Rocha los “atrapaba”.
Así las cosas en un primer tiempo anodino los rojos llegaron 4 veces, Rocha ninguna.
Sobre los 10´pared Denis / Silvera remate desviado.
A los 20´ tira Graví desde lejos, pasó cerca.
A los 39´ primer desborde de Martin Ávila por derecha, centro y el cierre rival otorga un córner, de ahí jugada de Yari y el “Fifi” centro al primer palo, peinada de un rojo y travesaño.
Finalmente sobre los 43´tiro de Graví desde afuera otra vez, ataja Lemos y en el rebote José Denis la define pero Lemos se rehace y entre él y el vertical salvan a Rocha.
Conclusiones: Graví tiro cuatro veces de afuera, Denis es nuestro delantero más peligroso, Ávila cuando se la dan puede acelerar, Yari no está en ritmo como antes de la lesión, Rocha defiende con 8, Brañas duerme el partido, Maicol Silvera es un espectador.
El segundo tiempo siguió sin cambios, igual igual, hasta que Rodrigo Taran “rompe” en jugada individual y Goldaracena recibe un foul de atrás y de ese tiro libre, José Denis le mete soberbio “tres dedos” y Lemos hace terrible atajada.
Pero Treinta y Tres no supo nunca como abrir eso que Rocha planteó con el achique de los espacios entre defensa y medio juego, había dos alternativas, tirar de afuera y que Rocha se adelantara y poder “filtrar” una bocha entrelineas, pero Muniz cortaba todo o agrandar por afuera y ensanchar la cancha haciendo “correr” a Rocha.
Ese, en mi humilde opinión, es el talón de Aquiles de Rocha,”siente” físicamente el trajín de los partidos y no pudo soportar el planteo, un desborde de Goldaracena, lejos el más perjudicado por el sistema, obligado a jugar siempre de espaldas, saliendo a los laterales para jugar, “el Gatogol” habilita a Yari, este tira un centro y el balón da claramente en la mano de Bentancur.
José Denis preciso, Treinta y Tres 1 / 0.
A partir de ese gol creo que ninguno de los dos quiso forzar nada, a los dos le convenía, pero casi que por cumplir Rocha adelantó las líneas, pero sin desprotegerse mayormente.
Y creo, respetuosamente aclaró que ahí, agrandamos “al pedo” el margen de error.
Porque los cambios eran “cantados” debían entrar Darío Vera, para reforzar el juego aéreo alternativa que nos hizo perder el partido de vuelta en primera fase ante este mismo rival y Marcelo Camacho para ordenar el medio juego y para
evitar “alguna cosa rara” basado en su experiencia y conocimiento del juego.
Y el margen de error no solo no se achicó, sino que insólitamente lo agrandamos, de local, ganando, ante un rival literalmente conforme con no recibir más goles nada más.
Porque se desordenó totalmente el medio juego pese al ímpetu con que ingresó Simón Mier.
Un centro de Velázquez casi es conectado por Vera en la pasada en un aviso, aparte el centro vino de derecha a izquierda ¿recuerdan el tercer gol allá? Acuérdense.
Brañas desaparecido en el segundo tiempo aparece en el medio de nuestra área, habilita a Romero y su invasión solitaria culmina en un centro que Larronda aleja “barriéndose”.
Acá vale la pena recordar algo que hemos venido advirtiendo en todos los post anteriores de la selección mayor, salvo Alzueta el resto de los volantes no gana trancazos, sino trancas para contener debes anticipar, pues bien si el equipo se desordena y el físico ya no da, los anticipos siempre son tardíos y no recuperas la pelota, por eso era importante el ingreso de Camacho para ordenar las
líneas, clarísimo: el Técnico tomó riesgos, no cerró el partido.
Y si algo faltaba en esta historia de “jugar siempre”, un córner a favor pasado, Graví ¡la juega! Para Perdomo y este tira alto, en la tapa del libro, para que no te metan una contra, debes terminar la jugada.
Otro córner a favor y no la terminamos, sale la contra y Simón hace un foul táctico inteligente para cortar la contra, se genera un tumulto y resultan expulsados Lemes que había ingresado y el buen zaguero Muniz.
Dicen en mi barrio cuando uno “agranda” al rival, calentado el partido sin necesidad “¿porque le pegaste al perro?”, eso hizo Treinta y Tres, porque “generar” todo “ese agite” ante un equipo guerrero que le gusta y está acostumbrado a ese clima de guerra, es literalmente ignorar nuestra historia y mostrar desconocimiento importante de la de ellos.
Y ver a Bitavares sacando a los empujones a los suyos del lio, sin provocar a nadie, haciendo señas ostensibles a sus jugadores dentro de la cancha de “métanla en el área que es ahí” y nosotros peleando en vez de ordenar y tratar de concentrar el equipo, el mismo que se come goles siempre en los minutos “calientes”, fue todo un presagio.
Lo cierto es que la bocha cayó en el área y les juró que me acorde de Oscar Arada que siempre entrena “un achique” para jugadas como esta porque dice que “en la historia siempre que yo jugaba nos hacían un gol así en el último minuto” Oscar qué razón tenes.
Treinta y Tres restó corta la bocha, ellos ganaron sobre la derecha, ¿se acuerdan ahora?, centro al medio del área, Romero anticipa en el medio solo, gran atajada de Maicol a puro reflejo y el rebote es de Romero de nuevo y nos rompe… la red.
Mazazo, baldazo de agua helada, knock out sobre la campana.
Un empate que duele en lo emotivo, otra vez igual, otra vez la cantinela de “nunca ganaron nada”.
La verdad para mi Rocha no empató, Treinta y Tres se empató solito, Rocha estaba chocho con el 0/1, pero ta ya esta ,después los ordinarios de siempre tirando piedras, los que no van a ir a Rocha, los que van a descargar los frustraciones a una cancha, pero también ahí dormimos, hubiera estado muy bueno e inteligente ir y sacarlos nosotros a los de Rocha y que no se diera ese clima de guerra del final, entiéndanlo: nosotros no sabemos ni estamos acostumbrados a eso, ahora hay que ir allá y?... toy seguro que “los tira piedras lo van a escuchar por la radio”.
Poca cabeza: para plantear, para vivir el partido, para ir allá, por eso per… empatamos de local.
Por Juan R. Silva
Que difícil fue armar este comentario, dicen los libros que cuando se pierde (este empate fue una derrota, por los puntos y por la forma) lo mejor es dejar pasar un tiempo para poder aquilatar el resultado y el análisis.
Treinta y Tres pese a no jugar bien, desmerit
o propio y merito mucho de Rocha y su planteo estratégico, tuvo una buena oportunidad de pegar primero e ir a Rocha no cómodo pero si con ventaja.Porque además de no tener ahora la ventaja del resultado a favor deberá anotar en su visita pues recibió una diana en casa, pero lo más doloroso en su estado de ánimo es sin dudas la forma: empate sobre la hora, como local y producto de una dolorosa mezcla de desconcentración, miedo escénico y mala suerte.
Sin dudas el análisis subjetivo del hincha buscara la explicación en un juez que incidió poco y nada, capaz que si lo miras bien a favor de los rojos, porque en la adición estuvo perfecto, en las expulsiones hasta creo que nos benefició y nos cobró un penal a favor, ¿que mas queríamos?.
Otro análisis podría ser, también en la subjetividad, la suerte que se le puede achacar al equipo celeste que la ha tenido es cierto pero que la ha ayudado mucho con planteos totalmente acertados y sobre todo con un racionamiento de sus recursos humanos realmente eficaz producto de un técnico estudioso y trabajador que es claro no desprecia para nada el análisis del rival y en eso se ha hecho fuerte, no olvidemos que Rocha está invicto, nos empato acá, nos ganó allá merecidamente y le ganó también de visita a Melo, algo y ya lo dijimos, tiene.
Y solo a modo de ejemplo digamos que Rocha debía suplir acá la falta de Luis Maguregui y Roberto Pioli, dos de sus más emblemáticos, sino los más, jugadores del elenco de Bitavares, y lo hizo de tal manera, plantando una figura táctica adecuada y “muy corta” entre las líneas que realmente fue eficaz.
Rocha mostró desde el principio un 4/2/3/1, con una media cancha “gorda” que ponía continuamente en el primer tiempo a 8 jugadores celestes por detrás de la pelota y a Jorge Brañas “flotando” entre el medio juego y el ataque con una punta definido solo.
Esa posición de Brañas fue un elemento determinante en el primer tiempo, porque la línea de tres defensiva roja no sabía que hacer, si salir lejos a buscarlo Taran o quedarse y esperar que alguno de los contención o Graví o Alzueta lo tomara.
Jorge Brañas que es un buen jugador, comenzó a partir de esa libertad a tener precisión y confianza y literalmente “durmió” el primer tiempo, porque los rojos no encontraban forma de vulnerar el cercado defensivo celeste y después tampoco encontraban a Brañas y su tenencia.
Porque Treinta y Tres cuyo técnico se ha definido como “más preocupado por lo nuestro que por lo del rival", plasma “lo nuestro” como tener la pelota con muchos toques laterales, con poca o nada verticalidad, pero afirmado en el trasporte de José Denis o Yari Silvera y eso Bitavares lo sabe bien y cada vez que estos dos jugadores tenían el balón, Rocha los “atrapaba”.
Así las cosas en un primer tiempo anodino los rojos llegaron 4 veces, Rocha ninguna.
Sobre los 10´pared Denis / Silvera remate desviado.
A los 20´ tira Graví desde lejos, pasó cerca.
A los 39´ primer desborde de Martin Ávila por derecha, centro y el cierre rival otorga un córner, de ahí jugada de Yari y el “Fifi” centro al primer palo, peinada de un rojo y travesaño.
Finalmente sobre los 43´tiro de Graví desde afuera otra vez, ataja Lemos y en el rebote José Denis la define pero Lemos se rehace y entre él y el vertical salvan a Rocha.
Conclusiones: Graví tiro cuatro veces de afuera, Denis es nuestro delantero más peligroso, Ávila cuando se la dan puede acelerar, Yari no está en ritmo como antes de la lesión, Rocha defiende con 8, Brañas duerme el partido, Maicol Silvera es un espectador.
El segundo tiempo siguió sin cambios, igual igual, hasta que Rodrigo Taran “rompe” en jugada individual y Goldaracena recibe un foul de atrás y de ese tiro libre, José Denis le mete soberbio “tres dedos” y Lemos hace terrible atajada.
Pero Treinta y Tres no supo nunca como abrir eso que Rocha planteó con el achique de los espacios entre defensa y medio juego, había dos alternativas, tirar de afuera y que Rocha se adelantara y poder “filtrar” una bocha entrelineas, pero Muniz cortaba todo o agrandar por afuera y ensanchar la cancha haciendo “correr” a Rocha.
Ese, en mi humilde opinión, es el talón de Aquiles de Rocha,”siente” físicamente el trajín de los partidos y no pudo soportar el planteo, un desborde de Goldaracena, lejos el más perjudicado por el sistema, obligado a jugar siempre de espaldas, saliendo a los laterales para jugar, “el Gatogol” habilita a Yari, este tira un centro y el balón da claramente en la mano de Bentancur.
José Denis preciso, Treinta y Tres 1 / 0.
A partir de ese gol creo que ninguno de los dos quiso forzar nada, a los dos le convenía, pero casi que por cumplir Rocha adelantó las líneas, pero sin desprotegerse mayormente.
Y creo, respetuosamente aclaró que ahí, agrandamos “al pedo” el margen de error.
Porque los cambios eran “cantados” debían entrar Darío Vera, para reforzar el juego aéreo alternativa que nos hizo perder el partido de vuelta en primera fase ante este mismo rival y Marcelo Camacho para ordenar el medio juego y para
evitar “alguna cosa rara” basado en su experiencia y conocimiento del juego.Y el margen de error no solo no se achicó, sino que insólitamente lo agrandamos, de local, ganando, ante un rival literalmente conforme con no recibir más goles nada más.
Porque se desordenó totalmente el medio juego pese al ímpetu con que ingresó Simón Mier.
Un centro de Velázquez casi es conectado por Vera en la pasada en un aviso, aparte el centro vino de derecha a izquierda ¿recuerdan el tercer gol allá? Acuérdense.
Brañas desaparecido en el segundo tiempo aparece en el medio de nuestra área, habilita a Romero y su invasión solitaria culmina en un centro que Larronda aleja “barriéndose”.
Acá vale la pena recordar algo que hemos venido advirtiendo en todos los post anteriores de la selección mayor, salvo Alzueta el resto de los volantes no gana trancazos, sino trancas para contener debes anticipar, pues bien si el equipo se desordena y el físico ya no da, los anticipos siempre son tardíos y no recuperas la pelota, por eso era importante el ingreso de Camacho para ordenar las
líneas, clarísimo: el Técnico tomó riesgos, no cerró el partido.Y si algo faltaba en esta historia de “jugar siempre”, un córner a favor pasado, Graví ¡la juega! Para Perdomo y este tira alto, en la tapa del libro, para que no te metan una contra, debes terminar la jugada.
Otro córner a favor y no la terminamos, sale la contra y Simón hace un foul táctico inteligente para cortar la contra, se genera un tumulto y resultan expulsados Lemes que había ingresado y el buen zaguero Muniz.
Dicen en mi barrio cuando uno “agranda” al rival, calentado el partido sin necesidad “¿porque le pegaste al perro?”, eso hizo Treinta y Tres, porque “generar” todo “ese agite” ante un equipo guerrero que le gusta y está acostumbrado a ese clima de guerra, es literalmente ignorar nuestra historia y mostrar desconocimiento importante de la de ellos.
Y ver a Bitavares sacando a los empujones a los suyos del lio, sin provocar a nadie, haciendo señas ostensibles a sus jugadores dentro de la cancha de “métanla en el área que es ahí” y nosotros peleando en vez de ordenar y tratar de concentrar el equipo, el mismo que se come goles siempre en los minutos “calientes”, fue todo un presagio.
Lo cierto es que la bocha cayó en el área y les juró que me acorde de Oscar Arada que siempre entrena “un achique” para jugadas como esta porque dice que “en la historia siempre que yo jugaba nos hacían un gol así en el último minuto” Oscar qué razón tenes.
Treinta y Tres restó corta la bocha, ellos ganaron sobre la derecha, ¿se acuerdan ahora?, centro al medio del área, Romero anticipa en el medio solo, gran atajada de Maicol a puro reflejo y el rebote es de Romero de nuevo y nos rompe… la red.
Mazazo, baldazo de agua helada, knock out sobre la campana.
Un empate que duele en lo emotivo, otra vez igual, otra vez la cantinela de “nunca ganaron nada”.
La verdad para mi Rocha no empató, Treinta y Tres se empató solito, Rocha estaba chocho con el 0/1, pero ta ya esta ,después los ordinarios de siempre tirando piedras, los que no van a ir a Rocha, los que van a descargar los frustraciones a una cancha, pero también ahí dormimos, hubiera estado muy bueno e inteligente ir y sacarlos nosotros a los de Rocha y que no se diera ese clima de guerra del final, entiéndanlo: nosotros no sabemos ni estamos acostumbrados a eso, ahora hay que ir allá y?... toy seguro que “los tira piedras lo van a escuchar por la radio”.
Poca cabeza: para plantear, para vivir el partido, para ir allá, por eso per… empatamos de local.
No hay comentarios:
Publicar un comentario