Claramente
Por Juan R. Silva
Treinta y Tres le ganó lo por 5 a 0 claramente a un débil representativo de Castillos que fue una muestra clara de un sector 2 en este tipo de torneos.
Con el propio técnico Alejandro Lioret, buen jugador, y solo 4 suplentes, prácticamente solo, el elenco local sufrió el dominio rojo y recibió un resultado que fue claramente benévolo para con la diferencia conceptual que se vio dentro del campo.
Al minuto y pese a esas circunstancias que les decíamos que tenían los rojos rochenses, un “garrón” de Lioret luego de un tiro libre sorprendía en una asistencia a De Souza q
ue desviaba el remate final en buena posición.Treinta y Tres trataba sobre todo de encontrarle la vuelta al campo de juego reducido y al pique de la pelota que ya dijimos en el partido de juveniles que realmente era muy vivo y complicaba quien intenta jugar con toques cortos y volumen de juego, propuesta esta del equipo del Olimar.
Los locales salieron los primeros minutos donde pareció rebelarse y hubo un penal, pequeño pero penal al fin de la zaga roja contra un delantero de Rocha en un centro.
Luego de ese apremio inicial que incluso tuvo también algún golpe fuerte de los visitantes, Alzueta a Lioret, poco a poco y por los laterales Treinta y Tres empezó a mostrar su mejor forma técnica e individual.
José Denis y Mario Perdomo se transformaron en indetenibles para los rochenses y por afuera los olimareños perforaron literalmente a
su rival.Jorge Alzueta avisó con un tiro desde lejos, golpeando el balón en el travesaño.
Un desborde por derecha de Denis termina en un centro que de primera Goldaracena convierte en gol y… problema solucionado.
Porque todo sabíamos en el partido, en la cancha que Castillos resistiría hasta el primer gol y así fue.
Martin Ávila desvía una chance muy clara y se veía venir el segundo gol, que llegó de una maniobra preciosa de Mario Perdomo quien enganchó de zurda y le metió “una cocoa” bárbara de derecha al balón que ingreso arriba, “donde anidan las arañas”.
El gol de cabeza del “Gato” Larronda absolutamente solo en el segundo palo, fue el último hecho destacable de un primer tiempo donde Treinta y Tres realmente tenía todo bajo control y que no daba realmente para darle mucho color.
Solo quizás la amarilla de que se llevó Alzueta que hizo que el técnico con buen tino lo cambiara.El segundo tiempo fue un decorativo solo con la preocupación de si la luz daría para terminar el partido, porque Treinta y Tres con los ingresos de Camacho, Mieres y Simón Mier le fue dando futbol a las alternativas y eso fue importante, tenemos plantel y eso en una Copa exigente es muy importante, porque Marcelo mostro que tiene orden y que es importante ordenando y Simón le dio un soplo de vitalidad al medio juego.
Otro golazo de Mario Perdomo, igual al del primer tiempo pero más al ángulo la pelota y otro del “Gato” Larronda, dieron cifras finales a un partido donde nunca hubo equivalencias.
Treinta y Tres tiene 5 puntos, buena diferencia de gol, está arriba, ahora en la segunda fase debe seguir afiatando su equipo. Este partido fue un triunfo cómodo.
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