Calladito y
por los Palos.
Por Juan R. Silva
Yerbalense le dio vuelta el partido a Vaca Azul Olimarudo,
ganó los tres puntos y queda al acecho de cualquier traspié que tengan los
grandes de acá en adelante, en la búsqueda del unico objetivo de competencia
que puede obtener, el Clausura.
Comenzó ganando el rosado con un golazo de tiro libre de
Diego Sosa, la gran incorporación de la temporada y que ha pagado sobradamente
la ambiciosa apuesta del Olimarudo, lleva 13 goles en la temporada y este gol le
pegó duramente a los dirigidos por Manuel Correa que no pudieron en todo el
primer tiempo lograr ni la fluidez de juego que habitualmente tienen “las
fieras del Yerbal” ni estuvieron firmes en defensa por los laterales.
Pese a que el gol de
Sosa obligaba a los albi verdes a adelantar sus líneas, el buen partido de
Alonso en el arco rosado, la firmeza de su última zona, con un buen trabajo de
Horacio Gonzales a experiencia y de Silvera ordenando el fondo absorbía totalmente
los tenues intentos del elenco del Yerbal, que intentaba algo de desborde por
Moreno pero que veía a Bruno Teliz impreciso y confuso a la hora de ganarle las
espaldas al improvisado medio juego de la Vaca.
Porque Elder Gadea y Matías Gallegos no son, por
conocimiento del puesto , un doble 5 que
pueda infundirles respeto a los volantes rivales, pero era tan confuso lo de
Yerbalense, no dándole sus jugadores la conducción a Henry Vaz, quien debe
hacerlo, sino que intentando todos esa asistencia que permita el gol, imprecisa y apurada, que los dos jugadores rosados
fueron subiendo a medida que transcurría el primer tiempo, su nivel.
Lo de Gallegos fue
excelente en la primer aparte bajando su nivel en el segundo tiempo y
explicaremos más adelante porque, pero en una posición de enganche retrasado
sobre los veinte de ese lapso “agarró” la manija del partido y metiendo bochas
entre líneas, descubrió a las espaldas de los defensas laterales del Yerbalense,
espacios que fueron un dolor de cabeza y que solo la gran lectura de juego de
Lago y el encomio físico emocionante de Lesi Rodríguez pudo disimular y que
incluso obligó a una gran atajada de
Acosta ante Sosa con el pie que
sería fundamental.
Porque si la Vaca
tomaba dos goles, antes del entretiempo, tenía la bajadita del Colón a favor, hubiera sido otra la historia eso es seguro,
es mas tuvo en esa primera parte 5 oportunidades claras Vaca Azul Olimarudo, no
tan claras como la referida pero alguna muy importante también y no pudo finiquitar ese dominio más
que territorial, conceptual del partido.
Sobre el final del primer tiempo, ya habiendo pasado el
mejor momento del fusionado Yerbalense en los pies de Lago tuvo una oportunidad
pero bien Alonso la anuló y eso, esa incidencia, no pude hacer olvidar que los rosados fueron
superiores en la primera etapa.
Para los segundos 45 una sorpresa a favor de Yerbalense ,
tan sorpresa como aquel tiro libre de Sosa al comienzo del partido, un tiro
libre, un “scrimmage” en el área de Alonso, la pelota que sale afuera del área
y el tremendo zapatazo de Matías Abella, en lo del, reboteo y explosividad,
pleno empeine y uno a uno, no hablemos de merecer no, hablemos de contundencia.
Impactó ese gol el partido pero más lo impactó que en la
jugada siguiente el juez Cidade, de buen arbitraje, se comiera, por correr mal la cancha, un
clarísimo penal de Acosta a Sosa, llega tarde el arquero sobre el borde del área y su puñetazo hace pleno en
el rostro del delantero que ya había anticipado el balón, lo que quieras con la
intención, que es solo para "los hands" además, hubo imprudencia del
arquero y contacto, el tema es que fue “en la zona ciega” del trabajo de terna,
donde corresponde al árbitro y queda lejos a los líneas y el árbitro venia muy
lejos.
Y ese penal seria decisivo
y definitorio, porque en la recarga, pelotazo frontal, “abanican” los dos
zagueros de La Vaca, dos yerros enormes
de ansiosos que se ponen, pero frontales he!! Y Petry elimina el achique de
Alonso y dos a uno revierte el elenco de Correa.
La explicación de esto, de esta virada, errores humanos, mal
achique de la defensa rosada en la salida del tiro de esquina (salieron muy
lentos y cada uno en la suya sin mirar adónde iba la pelota) el penal que no
cobra el árbitro y el doble error de despeje de la zaga, insisto no buscar explicaciones
raras, una sucesión de errores individuales.
Luego la explicación de lo que vendría, el cambio de la Vaca
en el entretiempo, saliendo Horacio Gonzales,
pasando a Elder Gadea al lateral
izquierdo y poniendo a Mark Rodríguez,
Pero el esfuerzo de Mark, corriendo todo con una generosidad
tremenda, le dio también otra energía a los rosados, su recuperación a puro
tranco mas el nivel de todo el partido de Gallegos y el ingreso de Barreto, el vergarense, mucho más
colectivo en su concepción del juego,
que todos los compañeros que juegan en
la ofensiva de la Vaca incluido Sosa he!, logró
que el elenco rosado diera vuelta esa superioridad que a partir del dos a uno
pareció, ópticamente tener Yerbalense, pero no le dio, otra vez el gran trabajo
del fondo del Yerbal y de Henry Vaz , apretando las líneas y nutriendo de
“trafico” la zona de elaboración rosada, mas su ya conocida ansiedad en la
definición, se apura siempre la Vaca, permitió que Yerbalense mantenerse en el
control del partido y sobre el final lograr tranquilidad con un cabezazo a la
salida de un tiro libre desde el costado de Lesi Rodríguez que redondeo así un
gran partido.
“De atrás y calladito” aprendiendo de viejos errores viene
Yerbalense, sabe que le queda solo una bala : el Clausura y trata “de no hacer
olas” para llegar al final especulando con una caída de los dos de arriba, cosa
difícil pero no imposible dada la irregularidad de nuestro futbol, el albi
verde, aun sin tener un gran año como este 2015 sigue siendo un equipo de los
considerados de “arriba” y seguramente en
la lectura de su desarrollo es un dato importante, quizás no captado por
la inmediatez del momento, aun sin lograr un rendimiento optimo es un equipo competitivo
y es un detalle a no desmerecer, insisto en su lectura desapasionada, sin dudas
todos los “entendidos” del futbol olimareño pensaban que este año sería un año
de transición en el albi verde, si lo fue estuvo nuevamente en la pelea, pero
con un perfil, por lo menos para mi mucho más representativo de sí mismo y de
su historia de cuadro de barrio y que hace que los que no estén en la pelea
quieren que sea “el convidado de piedra” de esta historia 2015.
Lo de Vaca Azul, voy a decirlo claramente, en este formato
me pareció lo más convincente y coherente que le he visto hacer en el año a los
de Gómez aun en la derrota, una apuesta fresca, con juego, dinámica y sobre
todo apelando mas al juego que a la “actitud”, mucho más centrada y con los
pies en la tierra que esa “locura” de algún momento donde al “calór” de la
contratación de Sosa hasta soñó campeonato, esto, poniendo muchos chicos y
afirmándose en la experiencia de Alonso, Silvera y Barreto, sabiendo que deben
de jugar a buscar la peligrosidad de Sosa y jugando el balón a ras de piso,
yendo a las divididas con ganas, parece ser un principio de algo coherente, sino es
que fuera un final, por lo menos eso dice la calle, lo que sería verdaderamente lastimoso, porque
seria y perdón por el verbo redundante, “un eterno empezar”, cuando como ahora, como equipo parece haber encontrado su forma , su “idea” adecuada y
que ( esto debe ser asimilado y masticado) dependió siempre y dependerá mucho
mas de las características técnicas, atléticas , anímicas de los jugadores y su contexto que del querer de los directivos, técnicos o
jugadores.
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