Ni la “Mae” Sara
Por Juan R. Silva
Por Juan R. Silva
Dice un dicho popular entre los remeros olimareños, que cuando algo es inevitable ni la “Mae” Sara puede, en alusión a una sanadora, que según dicen ellos, se desempeña con mucho éxito en Varela.
Pues bien, desde el primer día de la travesía que impecablemente para las posibilidades del canotaje olimareño llevó a cabo la Liga de Remo de Treinta y Tres , con el comando de el profesor Freddy de los Santos un verdadero “tigre” a la hora de llevar adelante el evento, decía que desde el primer día, desde la primera vuelta de los kayak doble se vio que el dúo de Manuel Garaycoechea y Jorge Ferrier, del equipo argentino Pesca Concordia, ganaría de no pasar nada raro, la competencia.
Porque amigos ya en esa primera etapa fue contundente el nivel mostrado por los dos argentinos, y en un circuito que contaba con un nivel del rio bastante bajo, algo que los perjudicaba notoriamente, los dos remeros argentinos ya sacaron ventaja incuestionable a las dos parejas olimareñas, Castro / Vergara y Soto /Gadea que el año pasado se habían disputado la corona.
El nivel del rio seria sin dudas la estrella “condicional” de la competencia, porque en esos primeros momentos parecía la única condición que podría equipara mínimamente la lucha y para nosotros quedo simplemente en una anécdota, la diferencia fue contundente y demoledora.
Y entonces el transcurrir de la competencia fue solo asombrarnos con la calidad técnica y los fundamentos físico atléticos de dos “señores deportistas” como los llamó el profe De Los Santos.
Acá hagamos un pequeño paréntesis para contarles que Ferrier es un remero y triatlonista de excepción a nivel internacional, ganando infinidad de competencias en distintos países, a viajado Europa incluso, que el año pasado además de dirigir al Remeros de Salto, una de las mas, sino la más poderosa instituciones del canotaje uruguayo, fue técnico de la selección que fue al sudamericano representando a Uruguay y que como nota de color fue técnico del tenista Pablo Cuevas, entrerriano como él , nacionalizados uruguayos los dos, el mejor tenista uruguayo, que fue remero antes de encarar para la raqueta, es decir estuvimos ante “un mostró mostró” , que además, organiza eventos de canotaje multitudinarios en Entre Ríos,” un master” que dignificó nuestra competencia comarcana indudablemente.
Y así en las restantes 6 etapas los argentinos ratificaron su favoritismo pese a algún revolcón que deben de haber llevado sin dudas en la segunda y tercera donde le engañoso cauce del Olimar sorprendió a la mayoría de los remeros sobre todo en la zona conocida como “las cascadas” donde más de un conocedor debió abandonar.
Pero a medida que se acercaba al final en el Cebollatí la comodidad de los entrerrianos era evidente y así sin grandes sobre saltos se llevaron la cuadragésima edición de la Regata, en post venideros te contaremos las diferentes categorías y las historias que nos ha dejado esta edición.
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