31 de Octubre 2017
El Celular de Dios.
Por Juan R. Silva
Barrio Coya 2 (Alfonso García y Gastón Corrales)
Peñarol 1 (Julián Araujo)
¿Y si tuvieras el celular de Dios? ¿Le preguntarías por qué
permitió lo que ahora te atormenta? ¿Le pedirías consejo para superar tus
temores y problemas?
Para el fútbol de Treinta y Tres hoy Nuber Muraña tiene el celular de Dios… a
partir de su experiencia y conocimiento del medio…"La única fuente de
conocimiento es la experiencia." - Albert Einstein.
Por eso este pasado sábado en el Parque Colón Barrio Coya
salió con un plan definido a través de la planificación de su técnico.
La idea era hacerle un presingg a la recuperación de la
pelota en el rebote que habitualmente, por su característica física y técnica
tiene el medio campo de Peñarol, se llevó a cabo, sobre todo mientras
estuvieron en el campo de juego los hermanos García, pero tenia un complemento
trabajado que era la descarga sobre el lateral que quedaba de cara a esa
recuperación varelense, habitualmente “Chano” De La Cruz y el pelotazo cruzado,
tratando de sacar la pelota de la zona de confort de Diego Barboza y de ganar
las espaldas de los laterales, sobre todo en el primer tiempo de David Díaz que
hace tiempo que no jugaba y recién esta volviendo a su ritmo de juego.
Los dos goles del Barrio Coya en el primer tiempo fueron de
esta manera, una vez con un control orientado de “Toncho” García que define
ante Sosa y la otra vez para la llegada desde atrás de Corrales que define por
sobre la salida del arquero aurinegro.
El resto fue un control total de la primera parte del minuto
uno a el 45 del Coya, porque su pareja de back, muy rápidos y decididos le permitían
que los duelos individuales de los laterales y del volante de contención Laxalt, un relojito,
siempre tuviera una supremacía numérica ante los delanteros aurinegros y así
cuando, las pocas veces que podía zafar del presingg de los volantes franjeados
en el medio juego, Peñarol obtenía una pelota en ofensiva esta viniera mal
jugada y con sus delanteros en inferioridad numérica.
Mas corto, con mayor preeminencia de los volantes Barrio
Coya ganaba en todas las lineas, por el planteo 4/5/1 con Rezende haciendo un despliegue
tremendo tratando de que los pelotazos de Barboza sobre todo fueran incómodos,
Barrio Coya recuperaba y después dándole la pelota a los García , estos en una
tarde inspirada, donde las jugadas técnicas y de dominio individual que
permiten que su equipo descanse, les salieron todas, controlaban totalmente aun Peñarol que sin la posibilidad de ganar
rebotes y jugar cómoda la salida de estos se quedo sin juego absolutamente.
Sin plan A Peñarol, porque el retraso de Marcos Jiménez ante
la falta de Facundo Cuello disminuyó claramente el poder de recuperación
carbonera, sin poder poner en funcionamiento su plan A decía, Peñarol no articuló solución a su problema de
construcción, porque insisto Muraña en su planteo referencia a Gutiérrez y este
como no le llegaba el balón se vino a jugar a sus propio campo y así los
anticipos varelenses era mas peligrosos.
Obtenida la ventaja Barrio Coya antes de terminar la primera
etapa tuvo un problema importante que fue la lesión de Rezende porque se quedo
sin punta rápido para desahogar cuando la agresividad en la marca de Peñarol, exacerbada
por un mal arbitraje de Sobrera, que si sos defensa te deja pegar impunemente
pero si sos delantero te amonesta muy fácilmente, empezó a delimitar su campo
de acción.
Peñarol golpeó impunemente en el final de la primer aparte y
en el comienzo del segundo tiempo, a Alfonso García lo “cazaron” sobre todo en
la segunda parte y como nosotros contamos las faltas cometidas, previendo lo
que pasaría después, podemos decir que le hicieron en 15 minutos 8, 8 !!! Faltas,
de manera persistente, ante la pasividad del arbitraje y con la excusa de que "carga"
a los rivales, una absoluta falsedad, “el Toncho” juega así cuando gana, cuándo
empata y cuando pierde y te tira un caño al minuto y a los 90, en un amistoso o
en una final, decir otra cosa es mentir y mostrar la inferioridad personal como
jugador y sobre todo no conocer el fútbol de Treinta y Tres.
Pero para eso están los árbitros, para cuidar a los que
juegan y debo insistir que Sobrera, otra vez de muy mal partido, lo expulsa por
tirar un caño con el partido parado a un rival, luego de que le hubieran
cometido 8 faltas en reiteración real …tendencioso y falto de criterio.
Ahí Muraña faltando un lapso importante de tiempo mostró
otra vez su rapidez de decisión y de lectura del juego sacando a Federico García
el hermano de Alfonso , que enojado ya
estaba en todos los “pico a pico” , metiendo un lateral para liberar a
Aguirrezabala como delantero.
Pensábamos que en ese momento, pese a tener la bajada del
Colón
en contra Peñarol arrollaría al Coya al carecer de sus dos
jugadores de tenencia el varlense y a que Oscar Muraña por lo menos le daba
ganas y rebeldía a su ataque aunque la salida de Cristian Gutiérrez por lesión
fue un balde de agua fría para los aurinegros, pero la aparición de Rodríguez en
el carril imponiendo su juego pausado y preciso mas que Aguirrezala sin ningún
tipo de dificultad asumiera la conducción y la tenencia del equipo, mostró
nuestra equivocación …Barrio Coya tenia variantes y las aplicaba.
Sobre el final con
Peñarol sufriendo el manejo de Aguirrezaba y el ingresado Juárez, que tenían el balón y provocaban faltas, con
Joel Martínez y Piriz ratificando su gran partido y Stol solucionando fácil un
par de pelotas difíciles que la rebeldía y el empuje de Peñarol fabricó, Barrio
Coya capeó el hombre de menos sin dificultad, Julián Araujo en un rebote
finalmente , luego de uno de los mil centros de Peñarol descontó pero ya no le
quedaba casi tiempo a Peñarol, que vio irse un oportunidad tremenda de tomar la punta de
Barrio Coya se afirma en el Clausura, esta puntero y empieza
a mirar de costado, con cariño la tabla anual hoy por hoy tercero por
diferencia de goles en hasta ahora una muy buena campaña.
Con un característica importante , todos jugadores (salvo
Piriz ) de Varela y que han tenido un paso por sus inferiores, un trabajo metódico
y comprometido de todo el equipo que en el parate continuo practicando y que
esta bien físicamente, todo esto amasado, formado y decorado por Nuber Muraña,
el hombre que en el fútbol olimareño…tiene el celular de Dios.
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