Por Juan R. Silva
El apasionante, a esta altura faltando 5 fechas aun, campeonato de futbol callejero que lleva adelante Grupoca 33 y que apoya la Intendencia de Treinta y Tres, tuvo esta tarde de Lunes un capitulo memorable.
Dos equipos de jóvenes que como no pudieron jugar ayer por la lluvia, decidieron enfrentarse hoy pese a que algunos estudiaban y otros trabajaban a eso de las 3 de la tarde, hasta ahí nada fuera de lo común salvo el apasionamiento por el juego de dos equipos que no están en este momento entre los que definen las primeras posiciones, apenas Atlas está ahí a 10 puntos de los de adelante pero ya siente que será muy difícil encabezar las posiciones, lo del O.S.A (Orden Sin Autoridad) si ya es casi imposible porque dado que la gran mayoría de ellos son atletas de la Federación Olimareña de Atletismo y las competencias que han encarado en este último tiempo los han hecho faltar a algún partido con la consiguiente pérdida de puntos.
Empero los chicos del O.S.A. fueron los más entusiastas en jugar ya que el próximo fin de semana tampoco estarán ya que van a la capital a competir en atletismo nuevamente pero como ven al futbol callejero como un buen trabajo de grupo, se encontraron este lunes en “La Bombonera” del barrio Olimar ante Atlas, que es “pierna” hasta para llorar en velorio ajeno, y los del “Mono” José Acosta encararon un partido que todos creían “uno más”.
Lo cierto fue que las condiciones del campo, con dos o tres charcos grandes y la intensidad con la que jugaron hizo que los que tuvimos la dicha de ver el partido y amar como amamos el futbol realmente nos sorprendiéramos del entusiasmo y de las alternativas cambiantes, que junto al entorno antes descripto y la solidaridad y compañerismo de todos los participantes me hizo ver el mejor partido de futbol callejero que he visto desde que arrancamos con esta actividad hace tres años.
Y con esto mas se afirma la línea ideológica de que los “Códigos Callejeros” deben imperar entre los jóvenes y que su comunicación, de quererlo ellos puede ser perfectamente fluida y amable, sin necesidad de que la competencia sea una barrera sino que más bien sea una conexión.
Fue emotiva la forma en que Atlas, que al terminar el primer tiempo perdía 5 a 1 no solo empató sino que dio vuelta el marcador y que el empate final de Micaela Alzugaray cuando se jugaban dos minutos de adición y la diferencia de Atlas era de dos goles, dejara a los dos equipos 45 puntos a 45, diera el toque épico a la justa , que reitero fue en todo momento jugada con dientes apretados, cuerpos embarrados y mojados y con algunos detalles técnicos que podrán apreciar en las fotos del Face.
Realmente contento por el partidazo que jugaron Atlas y el O.S.A., con el espíritu del futbol callejero, de comunicación y relacionamiento entre chicos distintos no solo en lo social, económico y cultural sino que más bien en las propias concepciones de vida, con el espíritu del futbol callejero decía, sobrevolando y salpicándose de agua y barro siguiendo la fascinante redondez de una Panther número 5 (el chivo va gratis jajajajaja) por “la Bombonera” del barrio Olimar.
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