viernes, 22 de mayo de 2015


A la pasada
 Por Juan R Silva
 Municipal 3 (Diego Mieres x 2 y Humberto Marta).
Peñarol 1 (Diego Arada)

 Municipal, aun perdiendo en la primera parte fue más intenso futbolísticamente que Peñarol durante todo el partido.
Quizás por características personales o porque  entraron más concentrados, la intensidad en el futbol está directamente vinculada con la concentración y aunque algún desorientado pueda confundirla con velocidad o despliegue exagera, la intensidad vendría a ser la capacidad que tiene un equipo  o varios jugadores de un equipo a mantener  un grado de energía elevado en el aspecto físico y mental durante un prolongado espacio de tiempo.
 Y Municipal los tuvo a partir de que tanto los hermanos Agriela como Marta, mas sobre todo el medio juego con Pastor como bandera y un “peleador” Echeverri dotaron al elenco negriazul de una rebeldía ante el mejor y más lindo funcionamiento colectivo de Peñarol que al revés de su rival arranco bien pero después se fue “despintando” totalmente.

 Porque fruto de su conocimiento y de las cualidades técnicas innegables de Gutiérrez, Pintos y Milder en el inicio y mientras los equipos se acomodaban tenía el balón, dominaba el juego y abría el marcador por intermedio de Arada.
Pero poco a poco y con la faceta antes descripta como bandera y con Pastor y Etcheverry empujando y metiendo Municipal metió al aurinegro en el partido de los dirigidos por “Pichón” Brun querían.

 “Palo por palo”, salteándose casi el medio y luchado.
Y por si algo le faltaba a Municipal el gol quieta que encuentra a Humberto Marta solo en “la Pasada” es una muestra de su mayor concentración, durmió totalmente el equipo de Peñarol, marcando posicional y solamente mirando como en el segundo palo del pobre Leandro Alves que nada podía hacer el partido se empataba.
 Fue un mazazo para Peñarol y un tanque de oxigeno para Municipal ese gol.
 Y el elenco negri azul, con el ingreso de Fernando Arnau transformó en más peligroso aun su planteo consiguiendo Diego Mieres, que hasta ese momento no había jugado un buen partido el segundo gol en otro centro pasado al segundo palo que fue donde vinieron todos los centros de Municipal, el segundo gol que sería más fuerte aun el golpe para los dirigidos por Oscar Arada.
 Y Peñarol aun con el ingreso de Rivero no pudo elevar su nivel de energía ni de concentración y solo atino a defenderse tirando la ley del offside hasta que uno de los tantos piques de Mieres, que a esa altura ya había levantado enormemente su rendimiento burlo el achique de Peñarol y su definición exquisita deja sin chance ninguna a  Alvez do Prado.

 Justo, claro y entusiasmante triunfo para municipal que perdió sobre el final a Maicol Pastor, baja muy importante, pero que jugó bien y sobre todo con mucha concentración.

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