lunes, 10 de julio de 2017

Campeonato Apertura 2017-07-10

Otra vez


Por Juan R. Silva

Lavalleja 2 (Braian Graví y Marcos Díaz)
Treinta y Tres 1 (Gonzalo Mespolet)



Partidos oficiales
Julio 2016,  Lavalleja: 2 a 1.
Octubre 2016,  Lavalleja: 1 a 0
 Julio 2015, Lavalleja: 3 a 2  
Noviembre 2015,  T. y T res: 2 a 0.
Abril 2014,   Lavalleja: 3 a 0.
Setiembre 2014,  Lavalleja 3 a 1.
Los últimos  partidos entre Lavalleja y Treinta y Tres muestran una “paternidad” futbolística importante de los militares, así  en los 3 últimos años pasados 5 victorias tricolores contra una solitaria  de los decanos, este partido no fue entonces la excepción y pese a terminar con 8 jugadores los militares nuevamente se llevaron los 3 puntos.
6 victorias de 7 partidos…hay algo que los albicelestes deberían analizar, pero no creo que dada su actualidad lo hagan , complicado  institucionalmente  en este momento, otras son las prioridades del equipo mas querido en nuestro fútbol, algo indiscutible, como nos gusta decir a nosotros “el que alguna vez ganó algo”.
Porque en un primer tiempo paupérrimo donde pocas cosas o casi ninguna pasó y se limitaron a los equipos a correr mucho, a trancar todo lo que podían y sobre todo a luchar el partido mucho mas que a jugarlo sea cual sea la idea futbolística que los dos esbozan, porque esto es así hoy los dos esbozan “jugar a algo” y nunca en esa primera parte quedó definido que.
Lavalleja con una línea de 4 justamente en línea sin nadie que sobrara extrañando horriblemente a Noble y sus cierres potentes, con un zaguero que poco a poco,  a Brun me refiero,  fue encontrando su lugar y haciendo pesar su exuberante desligue físico  pero con un Luís Dávila que se encuentra incomodo en la zaga sobre todo cuando debe sobrar porque le gusta “la pelotita” y enseguida que su equipo recupera el balón el se lanza presto a participar del juego no sobrando y eso hace que siempre jueguen en línea los dos zagueros militares y si le agregamos que los dos laterales también son de irse en ofensiva Lavalleja si algún equipo lo presiona alto tiene enormes problemas de balance, obligando a Braian Graví muchas veces a sobrar pese a ser el lateral izquierdo, el tema es que Treinta y Tres solo pudo hacerlo, presionar,  por lapsos porque fue claro que su preparación física sobre todo en los delanteros esta recién en ciernes.

En el medio es donde vemos lo mejor del militar con un muy buen partido de Nicolás Tabarez el mas ordenado siempre tapando agujeros en los zagueros y en el balance del medio juego, sin lucir para la tribuna porque el hace todo fácil, quitando y pasando pero siendo siempre la rueda de auxilio de sus compañeros y el que permite muchas veces esa “tenencia” llamativa que Lavalleja utiliza para descansar sus tremendo desgaste físico donde Juancito Moreno es el abanderado.
Juan, Pedro Larronda y Silvera  hacen el despliegue característico, marca registrada de los equipos militares dirigidos por Víctor Arturo Graví, vértigo, fuerza , verticalidad y mucho ritmo, desgastan por insistencia pero muchas veces como pasó este partido pierden precisión en afán de exigir y muchas veces llegan tarde a las marcas también y con fuerza desmedida como fue la jugada  de la expulsión de Juan Moreno, hasta ahí de los mas importante ofensivamente del militar solo por su agresividad y potencia que incluso sacude un tiro desde afuera de unos 35 metros que dio pleno en el horizontal de Larrosa el buen arquero decano.
El tema es que es tan obvio el interés en correr y dar ritmo del medio juego militar que es impreciso totalmente, tan intenso como impreciso y eso lo pagan “Toti”  Aquino y Cesar Larronda que mas pensantes, a otra marcha mas lenta y pensada, sienten que el vértigo de los jóvenes los supera y les pasa por arriba, ese tema es la clave de lo que debe mejorar el equipo de Graví, empastar los ritmos y sobre todo mejorar en la precisión de las habilitaciones, sino al segundo pase mal “los veteranos” ya no irán a buscar por una razón lógica y entendible… unos creen que corriendo se soluciona todos los otros lo quieren hacer pensando, porque no pueden correr también y ese desajuste se trasmite en imprecisión y choque continuo, eso fue Lavalleja ese primer tiempo, un tiro de distancia de Moreno y una jugada individual de Cesar Larronda que se va alta, poco muy poco para tener el protagonismo del partido ante este “desarticulado e improvisado” Treinta y Tres.
Porque lo del decano es claramente mas inconexo en este principio de temporada, con muchísimas ausencias individuales, los suspendidos, los lesionados, los con problemas personales, los  que ya no van a jugar, los que no tienen documentación, hay un equipo y algunos suplentes afuera hoy en el albiceleste, algo que es imposible que pueda disimular ningún cuadro en Treinta y Tres , pero que en este caso se encuentra con algunos problemas estructurales , la ida del profesor Yamandú Sosa “referente” en lo físico , emocional y hasta en lo idiosincrásico del Treinta y Tres, la instrumentación de un cuerpo técnico nuevo totalmente que además practica pocas veces ( para nuestra forma de ver la competencia) y que recién esta conociendo los jugadores, el estado prácticamente de “abandono” dirigencial que tiene los decanos, con solo su presidente y delegada  mas un par de allegados muy puntual realmente ,participando del apoyo logístico en el equipo.
Un equipo para salir campeón necesita 3 patas: dirigentes, jugadores y cuerpo técnico, Treinta y Tres tiene problemas en los 3 y solo una alternativa potable, necesita tiempo para que esos 3 elementos se conecten.
En este partido, en el estadio para mas complicaciones, volvió a echar mano al arquero mas fiel que ha tenido en los últimos tiempo, una vez mas Cristian Larrosa se metió bajo los tres palos albicelestes y puso la cara y el cuerpo teniendo un buen trabajo y sobre todo dando seguridad, algo que hoy Treinta y Tres necesita como el agua.
La defensa en línea de 4 tuvo algunas sorpresas de buen rendimiento como el lateral derecho Ruiz pero mostrando que tiene cero trabajo colectivo, solucionando Orgambide, Sosa y Bautista problemas puntuales gracias el apuro y la confusión del rival y a virtudes netamente individuales.
Un medio campo donde improvisó con Tabaré Sosa de volante por derecha , comprometido a correr al volante de su lado pero sin aparecer en esa parte en lo que mejor hace Tabaré y que hace que sea en este momento complicado del decano su máxima esperanza, crear futbol, armar jugadas para que sus compañeros tengan oportunidades de gol, arrumbrado contra la derecha con un rival de un lado y la raya del otro Tabaré perdió en esa primera parte su protagonismo y literalmente “se inmoló” tácticamente por su amor a su equipo, con también el debut de Facundo Rodríguez, que jugando como volante por izquierda, a Facu siempre lo hemos visto de delantero, regó el campo de su conocido esfuerzo , un chico que es ejemplo en nuestro futbol por su combatividad y actitud, pero que en el carril no conoce la función y eso era claro.
Otro tanto le pasaba a Mario Alfaro , casi siempre volante o lateral por fuera que ahora en el doble 5 con Mespolet tenia que manejar otras alternativas y terminaba esta “improvisación” decana con Baldivieso en su debut en el decano después de  un tiempo sin jugar, alguien que precisa por su forma de jugar estar muy bien entrenado y un debutante total que venia desde Vergara el jugador Dávila, que mostró algún fundamento interesante pero que se fue expulsado en otra futura ausencia mas del decano.
Dos sucesos importantes en ese primer tiempo tuvieron como protagonista el pobre arbitraje de Sobrera, un claro penal no cobrado en el área militar en el arranque del partido y la expulsión que para nosotros fue exagerada de Juan Moreno, que si bien fue fuerte, pero frontal ante Alfaro, dejo claramente expuesto que nunca tuvo la intención de golpear y que fue mas el efecto que la infracción misma, pero todos veíamos en ese primer tiempo que el arbitraje era demasiado autoritario, llenándose de tarjetas y que esa “línea arbitral” que tiene este juez, meritoria para ir a arbitrar inter departamentalmente por un tema que no tiene nada de vocacional sino de que es meramente profesional, llegaría en un momento que quedaría sin margen y paso, afuera Juan Moreno y eso cambiaria el partido., en Treinta y Tres los arbitrajes deciden los partidos porque los jueces “tapan” un error con otro y eso “saca de foco” a los jugadores y entonces es cuando “se pican” los partidos.
El segundo tiempo tuvo todo eso, con uno menos Lavalleja, Tabaré Sosa se fue de enganche y Treinta y Tres tenia el control del partido, con incluso un remate del Taba  muy similar al de Juan Moreno en el primer tiempo que también dá en el travesaño.
 Dentro de la paridad parecía tener mas clara las cosas Treinta y Tres , cuando llega el penal cobrado por Sobrera a favor de Lavalleja, debo decir que en el momento me pareció que podía no haber sido, sobre todo porque pensé que Mieres llegaba antes a la pelota y después por el envión golpeaba a Díaz, los dos ingresaron en el cambio pero luego cuando veo la posición en la que estaba el juez es imposible que desde la cabina uno tenga mejor visión de la jugada, estoy obligado a decir que  nadie mejor que Sobrera para ver y que si el lo dictamino es porque realmente fue penal.
Entonces reconociendo mi error de apreciación decir que el penal fue bien cobrado por el arbitro y que fue todo un riesgo del lateral albiceleste tirarse en esa tijereta ante un rival que entra a buscar saltando el balón.
Pero ya estaba instalado, porque había sido muy malo el arbitraje, el sentir de que se iban a dar la ley de las compensaciones y enseguida, por el manejo del partido en base a las amarillas y la doctrina del “lo toca lo toca” se va expulsado Pedro Larronda y Lavalleja queda con 9 y en la siguiente el expulsado es Dávila el vergarense, el descontrol arbitral lo pagan los jugadores eso es de perogrullo.
Y en ese momento de máxima emotividad del partido, con solo Tabaré Sosa intentando jugar,  un desborde de Diego Terra por derecha, que es mucho mas cuando va que cuando marca y Marcos Díaz que volando cierra la pinza y  convierte el segundo militar, su “festejo exagerado” al levantarse la camisa sobre la cabeza genera la segunda amarilla y Lavalleja se queda con 8 pero tiene dos goles de ventaja.


Faltaban pocos minutos y una adición de 5  que apuró al decano, con Tabaré jugando de 5 y todo el resto del equipo por delante, pero con Cesar Larronda de ultimo ahora en el militar manejando los tiempos y los espacios, en ese lapso fue tremendo lo de Sosa, jugando con el manual del armador, distribuyendo de un lado a otro del campo, moviendo a los pocos jugadores de Lavalleja, pero sus compañeros demasiado ocupados en “pelear” el partido, porque si hubieran mirado solo un poco el juego y no tanto los rivales y la pelota estoy seguro que el tiempo les hubiera dado para revertir la situación.
A los 90 el gol de Mespolet desde ángulo muy difícil le dio el dramatismo que le faltaba al partido , con 8 el “Lava” y con 10 Treinta y Tres terminó siendo Tabaré Sosa contra Lavalleja y el trabajo colectivo triunfó , con un poco de suerte porque se desvió el cabezazo solo y claro de Orgambide, que tendría que haber ido de 9 mucho antes si al lado de Paz hubiera alguien que supiera que “el Bizco” era nueve goleador en el babi solo superado por Emiliano Alfaro en su niñez y que muchas veces San Lorenzo “se salvó” mandándolo de nueve, pero …
Ganó Lavalleja y lo del inicio  voy a tratar de explicarlo rápidamente, es clarísimo que la esencia, la idiosincrasia del decano tiene mucho que ver , esta emparentada con lo épico, lo he dicho y expresado muchas veces, incluso  mi mas lindo post sobre futbol siempre considere que fue uno que equipare emotivamente a Treinta y Tres con 300 y los espartanos, pero esa fortaleza mental y anímica que es el basamento de toda la rica historia de los albicelestes en la que apoyan  sus conquistas mas importantes  tiene que ser complementada necesariamente por otros aditamentos que confluyen en cimentar su presencia o su accionar, la parte física es decisiva , uno mete mas si esta bien físicamente, sino “mete” un rato y después “se arrastra” o sino se impone físicamente es difícil que se pueda imponer mentalmente a no ser que técnicamente sea muy superior, esas son premisas absolutas en el futbol a las cual las excepciones confirman.
Lavalleja en los últimos años, de Freddy De Los Santos para acá, sabe que su esencia futbolística, ( esto me trajo, me acuerdo , una charla larga con un sub. jefe del 10 donde hablamos de la imagen del Regimiento, de Lavalleja y del arma , que la verdad es una de las mas lindas historias que tengo en esto del periodismo deportivo y que guardare siempre para mi, pero que ideológicamente fue muy intensa y fructífera que me la reservo justamente por respeto a alguien que se pueda sentir "tocado" ), decía que la esencia del militar es “Uruguay, Uruguay “ y “si hay que dar damos” aprovechando su mayor fortaleza, ellos trabajan de eso, física.

Cuando Treinta y Tres se encuentra con alguien mas potente física y este se determina a obtener el resultado, su potencial épico se desarticula, no apuesta a otro argumento en los momentos calientes de un partido ( salvó cuando lo dirigió Jacinto Terra) y eso vendría  a ser mi somera y  fácil explicación de porque en los últimos 7 partidos oficiales, en este ultimo con dos jugadores menos (lo épico) Lavalleja sostiene una paternidad importante sobre Treinta y Tres.

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