Copa Nacional de Selecciones 2017
Mayores
Gol de Braian Graví
Natural.
Por Juan R. Silva
Tal cual la ley de gravedad era casi una obviedad que
Treinta y Tres capital le iba a ganar a un disminuido Cerro Chato.
El tema físico, el
tamaño del campo de juego, el jugar cada 3 días y la ausencia de su mejor
jugador el vergarense Franco Castillo era demasiado peso en la balanza a la
hora de pronosticar un resultado posible, visto además que las dos posibilidades que esperanzaban a los visitantes,
lo imprevisible de este juego y el bajo nivel exhibido hasta este partido por
los rojos del Olimar, prácticamente no dependían de ellos.
Y fue natural que Treinta y Tres prontamente descubriera una
zona de gestación de juego a la izquierda de su ataque, donde la movilidad
inteligente de Gazañol marcó el camino pero recibía la solidaria y pujante
habilidad de Nicolás Gutiérrez y el muy buen inicio de juego de García, que era
imparable por un tema físico para los contenciones auri azules (Márquez
claramente disminuido en ese sentido saldría
sentido a los 20 minutos de la primera parte).
Ahí Treinta y Tres generaba
llegadas, el horizontal evitó lo que precipitaba casi, pero prontamente
Perdomo, con su habitual pegada centró bien y Jorge Alzueta prácticamente que se
llevo el balón por delante decretando la apertura, Cerro Chato apenas había
tirado una vez al arco con una pena libre del en este partido delantero Martínez.
Ese gol tranquilizó
tanto a los rojos que simplemente con el expediente de darle la pelota a los
auri azules y abroquelarse atrás no pasaron zozobra alguna y en una contra de
lateral a lateral, por las bandas como le gusta a su técnico, Eduardo Álvarez
habilitó a García este aceleró y su definición incomoda fue capitalizada por el
rebote en el arquero y el gol de Martín Ávila
sin obstáculos.
Después fue solo irse en “un pastoreo” de los rojos, dejar
transcurrir los minutos y que el primer tiempo pasara.
A la vuelta de este
ya era evidente que Cerro Chato no tenia mas nada físico para dar y Braian Gravi (que
se ha ganado la titularidad mas allá de gol) en un anticipo al primer palo, en
una jugada calcada del primer gol de Alzueta pone el tercero, ya estaba todo liquidado,
el temperamento indómito con un resto de
energía hizo que la visita se adelantara y Gazañol y Gutiérrez, como le gusta a
este equipo “corriendo” aumentaron el marcador a un score abultado.
Ferreira previniendo lesiones
y queriendo dar minutos, pues sabe que necesita a todos los suplentes disponibles,
aprendiendo la lección de lo pasado en la primera rueda para lo que se viene, hace ingresar a Cristian Gutiérrez,
Juan Francisco Puñales ( la muestra mas clara de esas lecciones que da el futbol ) y Diego Da Silva
y Treinta y Tres juntándolos con Mario Perdomo juega “a piacere” planteando tímidamente
una opción al juego de correr y que fue desbordar por los costados con posesión
porque Puñales le da mucho mas profundidad a las habilitaciones.
El gol “de todos los partidos” de Cristian Gutiérrez
fue una muestra, desborde por derecha y definición en la zona caliente del
delantero que si hubiera tenido otra asistencia, por su forma de moverse sin
dudas debió hacer un par de goles mas en el cortó lapso de tiempo que ingresó, Cristian
hace algo que es raro en nuestro futbol y que solo Gazañol equipara, jugar sin
pelota, es mas ante defensas pesadas y fuertes me parece que “el doble 9” es una linda opción.
Treinta y Tres ganó bien, mejoró algo su juego colectivo,
aumentó su confianza imprescindible para
lo que se viene, comienza a tener una columna vertebral basada en el buen nivel
de respuestas que tuvo Dino este partido, el trabajo siempre seguro y firme de
Eduardo Álvarez "bastoneando" una defensa que no tuvo grandes problemas,
lo de Jorge siempre presente, un rato de
García y todo el partido de Perdomo y Gutiérrez
que cuando están precisos nos dan dinámica por las bandas y la esperanza
goleadora de Gutiérrez cuando ingresó, los cambios nos permiten tener opciones
de "revolucionar" colectivamente al cuadro, no solo individual sino que Puñales y Da Silva, cada uno en lo suyo,
claridad el Tito, intensidad El Malevo cambian la inercia que tenia el equipo
en la primera rueda, cuando todo era igual antes y después.
Pero hay que tener
perspectiva, Cerro Chato por las razones mencionadas arriba era muy poca
resistencia, era lógico, era predecible, era Natural que se ganara y se goleara,
Treinta y Tres esta en zona de clasificación (mejor tercero), muy lejos de mis
expectativas pero mejorando una primer rueda muy deficitaria en materia de puntos y de juego,
debe y puede mejorar, como hizo ahora, pensando cada partido primero, “paso a
paso” como decía Mostaza Merlo.
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