Sub 15, Campeonato Nacional.
Victoria arachana…muy cómoda.
Por Juan R. Silva
Cerro Largo Capital
le ganó a su similar de Treinta y Tres por 5 goles a 2, en la cuarta fecha del Campeonato Nacional
Un partido donde el contexto, las condiciones “extra”, tipo el clima, la cancha y el ambiente
favorecieron claramente a la visita y esta con jugadores que brillaron en el
plano individual como Silva, Lima y Hernández
se llevo los tres puntos del Parque Colón, reitero y recalco de forma cómoda.
Nunca, ni aun en el momento en que se encontró en desventaja
corrió peligro el triunfo del equipo visitante, tal era su superioridad táctica
y física.
Seguro, practicó toda
la semana, hace un tiempo largo que este grupo de jugadores esta junto (jugaron
en el Cerro Largo en la liga profesional el año pasado) tiene una contención
como liga de su ciudad mucho más fuerte que la nuestra, por una cuestión
cultural incluso y sobre todo sus jugadores están mucho más en ritmo e
individualmente son superiores en muchos casos a los nuestros.
Abundar sobre las
carencias estructurales de competencia de este equipo rojo seria, sonaría más
bien a excusa y cuando una liga decide competir en un campeonato de estos lo
menos que puede hacer es poner excusas, sabe a lo que se expone y “disfrazar” de “esto trata de formar a los
jugadores de la selección mayor para dentro de unos años” es de las mentiras
más repetidas que he escuchado en mi vida, pero cada cuerpo de neutrales, por
desconocimiento o por terquedad las repite una y otra vez y me encantaría, cosa
que ya no voy a hacer, porque cada uno que viene a la liga te lee y te escucha
cuando no está ahí pero después parece olvidarse, mostrarles todas las fotos de
sub 15 que tengo donde se ve claramente que después a primera división llega uno
o dos de los que parecen en las fotos y tenemos que jugar con los segunda o
tercera “línea” que casi nunca son citados a estas selecciones.
Entonces si nuestras
selecciones sub 15 no forman a nadie ni son competitivas (este resultado y la
historia lo marcan) a que vamos a estas competencias sin la mínima
preparación?... a mandar a nuestros chicos a esto, a la guerra con un escarba
dientes para “hacer” que hacemos algo.
Lo cierto es que mientras ellos (Melo), como lo dije
anteriormente, con un trabajo de base físico aprovecharon esta semana que paso
para preparar este partido todos los
días entrenando , sobre todo en lo físico , nosotros (Treinta y Tres) no
pudimos practicar un día siquiera, el resultado, un triunfo claro, justo y
cómodo de la visita.
Que comenzó ganando
con gol de Agustín Araujo, luego de un
error en la salida, porque no estamos acostumbrados a jugar en canchas pesadas
, estos chicos no lo hacen nunca en estas condiciones de juego, quisimos salir
jugando corto con el apoyo, el apoyo le pegó suave, mal pisado justamente
encimado y urgido por la pelota y la
recuperación cerca de nuestra área les facilito las cosas , 1 a 0 pero en esos
primeros minutos mientras le agarrábamos la media a la pelota y sobre todo a la
fuerza para golpear el balón fueron todos de Melo, con un Silva esplendoroso
ganado todos los rebotes, saliendo rápido por Lima, que volaba por izquierda y
Treinta y Tres que prácticamente no pasaba el medio de la cancha.
Pero creo que en un momento, un pelotazo tirado casi por sobrevivencia
de un chico del fondo olimareño permitió la disparada de Ales Suarez por
izquierda, Cerro Largo mostro su faceta más débil, defiende mal cuando el rival
verticaliza entre líneas y la jugada
individual, dejando chicos rivales con el simple expediente de tocar el balón y
correr de Suarez encontró solo a De La Cruz y a conexión varelense de esta
selección roja empardaba el partido.
Pasó, sin merecerlo, pero por peligrosidad individual y por
carencias visitantes, el local, pasó con un gol tras jugada individual de
Arnaud, de las pocas veces que apareció pero cuando aparece Treinta y Tres es
sumamente peligroso, pero insisto y recalco, defiende mal Melo y eso ante
instancias mas desfavorable le puede complicar la vida ye s un ítem a estudiar
de darse un corte en tercera fase.
Bastó el ½ y que sintieran los chicos melenses que el doble
pívot rojo, Álvarez y Wilson Gómez a despliegue y corazón discutían la posesión
en el medio, para que liderados por Silva se adelantaran en el campo de juego,
15 o 20 metros y que volvieran a
recuperar, ayudados por la terquedad olimareña de jugar corto, de discutir la
posesión en el medio juego y que el retroceso de los “carrileros” rojos nunca
pasa la línea de tres entonces si te agarran a “media agua” como paso continuamente,
no tenes cobertura nunca por afuera.
Eso mas su potencial
aéreo, son más altos y más grandes en los cabezazos, permitió el empate del
lateral izquierdo Gastón Álvarez.
Más allá de que los
ataques superaran claramente a las defensas, hay algo claro, ese trámite, era
manejado y dominado por la vista claramente.
El segundo tiempo fue lapidario para las aspiraciones rojas,
porque el aspecto físico incidió, le dio aire y piernas a Melo para “sitiar” a
los rojos dentro de su área y recuperar
los rebotes a fuera del área continuamente, desequilibrando por potencia física
las divididas y definiendo las veces que quisieron y como quisieron en los
últimos 15 con 50 nuestros, con solo la oposición de Alan Segovia en muchas
oportunidades.
Todo esto magnificado por la expulsión, errada tal vez en el
momento, pero que se veía venir desde el primer tiempo del zaguero varelense
Andrada. Si algo le faltaba a Treinta y Tres para estar totalmente incomodo en
el partido era esto, 10 contra 11, con la “bajadita” del Colón en contra, sin
fuerzas físicas casi, sin entrenamiento, sin saber responder mucho, las
barridas continuas yendo al piso donde
no hay recuperación es una muestra clarísima de esto, con un planteo en i
entender equivocado que exponía a nuestro defensas, a cubrir muchísimo terreno
casi que mano a mano o en inferioridad numérica, la mala puntería, la ansiedad
y sobre todo al amor a la causa de los chicos rojos, que se desparramaban por
el campo haciendo un esfuerzo tan emocionante como extenuante, marcaron y
definieron un resultado decoroso.
Los goles de Guillermo Fernández y Facundo Silva fueron una
lectura de eso, antes de los 15 minutos del segundo tiempo 4 a 2 y partido
liquidado.
Insisto en la lucha de los chicos rojos, en la
predisposición y también fue importante que los cambios que realizaron
prontamente los dos entrenadores, desnaturalizaran el partido y se transformó
en un trámite donde solo se preveía
algún gol más de Melo, que llegó sobre el final en los pies de Xavier.
Derrota lacerante para los rojos, que creó que ahora si
entenderán que las ganas y buenas
intenciones es muy poco a la hora de
jugar competencias en serio, para ganar acá en lo domestico seguro que da, si
los cuadros que juegan el campeonato hacen selecciones y van a los partidos a
ver cuántos goles hacen, pero cuando la cosa es en serio todo cambia y ahora el
“juego del gato y el ratón” lo tiene que vivir ellos, es simple “Liga fuerte /
selección fuerte”, si en vez de ir a ver cuántos goles hacen porque tiene
“cuadro de robo” y a solazarse en la mediocridad de que sus técnico y sus
padres sueñen con “maizales gordos” fueran a una competencia pareja cada domingo durante todo el año, sin
importar si hace calor o llueve o “las canchas tienen que estar bien cuidadas
para que se juegue mejor al futbol”, si entrenaran todo el año con un
profesional de la parte física (porque el futbol es un juego físico) y cada
partido domestico en nuestro futbol
fuera una final, tendríamos ventajas estructurales y podríamos sentir la superioridad que
sienten ellos, pero eso lo digo una y otra vez cada año hace 15 y sigo pensando
que el problema del futbol de 33 es un tema cultural…queremos hacer “la fácil”
, somos un pueblo de poetas y cantores, cómodos, soñadores y le enseñamos a
nuestros chicos que lo más fácil del deporte es poner una excusa ante cada
problema, que sin entrenar se puede ganar y que “sin sacrificio” (por eso los
cuadros arman “selecciones” en lo local y los padres los llevan desesperados a
jugar ahí aunque sean suplentes ) se puede vencer en la vida ….por eso…nunca ganamos nada.
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