FUTBOL LOCO 33

Tardaron 11 meses pero gritaron:
¡¡¡TRICAMPEON¡¡¡.
Por Juan R. Silva
Lo primero: justo, merecido, limpio, indiscutible.
San Lorenzo fue el mejor equipo de la temporada y solo una muy buena primera parte de la temporada de los de la franja varelense y una resurrección de el elenco albo del globito en la segunda parecieron complicarle lo que en los papeles era lógico, fue quien hizo mas puntos en el año, ganó la anual, ganó los Play Off, tenia el ataque mas fructífero y la defensa menos vencida.
Quizás lo que mas complicó a la consagración de San Lorenzo por tercera vez consecutivas fueron los avatares de un campeonato de 11 meses que parecieron sobre todo esta tarde disminuirlo en la alineación, la oncena que se consagró esta tarde es muy distinta a la que arrancó el año e incluso hasta el cuerpo técnico es distinto.
Hoy San Lorenzo sabia que no tendría a su goleador Víctor "Gato gol" Goldaracena pero fiel a su idea de apostar fuertemente a campeonar haría debutar a Víctor Ruvira confirmando una primicia de hace un par de semanas de Fútbol Loco.
Como les decía esa era la apuesta que hacia San Lorenzo, fuerte, intencionada, Barrio Coya se presentaba esta tarde sin su figura máxima: John Fabricio Acosta el goleador de la temporada y el jugador del que técnicamente se puede esperar algo distinto.
Tarde hermosa soleada pero bien, campo espetacular dijera Wilson Mario Zeballos, tres radios trasmitiendo dos de Varela y una nuestra, casi 300 personas de marco y un ambiente de final.
Y arranca mejor el santo, luchando con el repechito del Colón pero mejor, con el libreto mas aprendido, este es el equipo y la figura que tiene en los últimos tiempos el azulgrana, mas precisamente desde que ese hincha –jugador- muy bueno persona como es Pablito Alvariza agarró una historia que parecía desmigajarse a mediados de temporada.
Y Pablito no inventó nada y en eso estuvo el mérito de levantar a un equipo que le dolía haber sido dejado a la deriva en el medio de la temporada y le puso Alvariza orden a San Lorenzo juega con 4 en el fondo, Camacho de 5, dos por afuera y el Ñato Aldave de enganche y dos puntas, lo sabemos de memoria, Barrio Coya mientras tanto varió para este partido y creo que se viene un recambio grande en el varelense, pasó a jugar con tres en el medio y tres puntas y a cambiar el pelotazo frontal para lateralizar un poco mas, pero fue evidente que el equipo no siente esa forma de juego.
Dice una ley no escrita del fútbol que los planteos tácticos se arman en base a las características de los jugadores y no que estos tengan que adaptarse a una forma de juego y para mi esa fue la causa de la enorme defección del Coya que recordaran ustedes ya en Varela jugó a muy poco, en el Colón esta tarde de sábado jugó menos.
Y San Lorenzo, comenzó a llegar, el Ñato tira de afuera y Vicentino contiene con dificultad, enseguida en una pelota quieta, el Karma de los varelenses esta tarde, Laurencena le hace un penal clarísimo a Orgambide que el colegiado no pita.
Un tiro libre de Vera pareció presagiar el gol pero el tiro del zaguero sale blando y el arquero del Coya se queda con el balón, a esta altura se corría mucho se pechaba pero no había claridad, sobre los 11 minutos, Darío Tejeira realiza un gesto técnico de otro partido y luego de levantar la pelota con un tiro soberbio supera a Miguel Correa y en la única llegada del Coya hasta ahí 1-0 contundencia que le dicen.
A partir de ahí debo ser consecuente con una idea, ni nuestros jugadores están preparados para jugar bajo presión ni a los árbitros de Treinta y Tres les interesa un pito el espectáculo.
Con una evidente línea de imponer la autoridad, porque el arbitro es el eje del espectáculo y debe manejar los tiempos de los partidos , el juez del encuentro empieza a amonestar por contactos que la lectura de una final y de lo que se estaba jugando de repente pedía otro manejo , pero convengamos también que nuestros jugadores y me refiero a los dos bandos , porque a San Lorenzo lo enloqueció en el primer tiempo al extremo que parecía vivir el azulgrana un día de furia el transcurrir esos primeros 45 cuando futbolísticamente tenia un mucho mejor panorama si seguía apostando a jugar.
Rodrigo Moreira recibe un amarilla sacada bien por el juez y enseguida Juan José Mieres recibe una amarilla también justa, entró con un deslizante desde atrás.
Y Mieres es un reflejo de esa histeria que tenia San Lorenzo, mientras Orgambide desvía un cabezazo a la salida de ¡un corner¡ Mieres que repetía ser la salida y el jugador con mas cambio de ritmo que tiene no solo San Lorenzo sino el fútbol de Treinta y Tres, se iba del partido que le pedía jugar, en una discusión con Tejeira.
Siguieron apareciendo amarillas casi todas por protestas, Rodriguez en el Coya, Martín Ávila en San Lorenzo.
Y a los 25 ¡en un corner¡desde la izquierda, gana Darío Vera, su cabezazo pega en el vertical derecho y el rebote le cae a Rodrigo Moreira que empata el partido.
Increíblemente el empate pareció potenciar la ansiedad azulgrana y Juan Mieres vuelve a cortar desde atrás y ve su segunda amarilla, San Lorenzo con 10.
Siguió el juez su show de amarillas, Tejeira, Vera, Cabrera y en una jugada intrascendente Martín Ávila carga al arquero rival que tiene el balón y carga su segunda amarilla.
¡Que necesidad¡, San Lorenzo queda con dos menos y lo único que podía patalear era que de repente el arquero Vicentino reaccionó, pero creo que el juez estimó que frente a la agresión rival Vicentino solo amenazó.
A ver, por mas que la tribuna santa lo quisiera comer, las amonestaciones estaban dentro de lo permitido y dictado por el reglamento, que el juez la pudo pilotear mejor capaz, pero muchachos todos sabemos como pitan los jueces de Treinta y Tres.
La furia santa fue total cuando el preparador físico de San Lorenzo agrede físicamente al cuarto arbitro Techera.
¿De fútbol? Poquito y casi todo de San Lorenzo.
Se cierra ese accidentado primer tiempo con ¡amarilla para Marcelo Camacho¡
Dos cosas: 4 llegadas de San Lorenzo, tres de pelota quieta, un gol, una llegada de Barrio Coya, un gol.
Nunca pareció tener el Coya dos jugadores más.
A la vuelta de la pausa, los dos iguales y acá el que lee mal es el varelense que deja venir a San Lorenzo y no asume el protagonismo del partido, presumo yo por no asimilar la idea futbolística.
Barrio Coya se preocupa por las amarillas que el juez gatillo en el primer tiempo, pasó de ser punto a ser banca y no estaba preparado, sino no se explica tantos errores.
Y el segundo tiempo cuando San Lorenzo lo precisó apareció Federico Daniel Aldave y primero aviso tirando de afuera y extremando a Vicentino y en el corner autogol de la defensa alba.
Sorpresa San Lorenzo con dos menos es el dueño de la pelota, la sabia movilidad de Marcelo Ferreira y la habilidad del Ñato le esconden la pelota a el Coya y cuando este la toma, el sector derecho de el santo de los juveniles Álvarez y Orgambide se tornan impasables al extremo de ser lo mas consistente del partido, dos chicos de la cantera que cuando se traían jugadores de afuera no eran tenidos en cuenta y ese es otro mérito de Alvariza.
Barrio Coya seguía confundido, quería tirarla para adelante e ir a pelear pero desde afuera le pedían que jugara y para mejor no estaban ni el Burro ni Torres para pegar algún zapatazo, entonces se "aturullaba" y cometía errores en entregas fáciles.
Darío Tejeira erró un gol clarísimo en un desborde y centro atrás y se ilusionan los fieles hinchas venidos de Varela pero solo eso ilusión después Álvarez, Orgambide, alguna palomita más efectista que efectiva de Correa y la suela del Ñato y la capacidad de aguantar el balón de Marcelo Ferreira.
El ingreso de Víctor Ruvira creo mas peligro óptimamente y una invasión plena de agresividad y potencia es cortada con jugada de expulsión de Luis Laurencena.
El final encontró al Coya renunciando a todo el orden y tirandosela al Rolo y la verdad Rolando Rivero en 15 minutos creo mas peligro que toda la delantera del Coya, dos jugadas suyas sobre el final hicieron a los hinchas azulgranas ahogar los gritos hasta el final, la primera gambeteando a Miguel Corres, entre el palo y Taran tapan el remate y luego otra invasión vertical desvía la pelota cuando todo Varela la empujaba.
Las expulsiones de Martín Santos y el recién ingresado Gravi solo sirvieron para que el tiempo corriera
Y así termino el match y así termino la temporada 2008.
Goles, expulsiones, gritos, clima de final y emoción
Nada o mucho ¿no? : San Lorenzo tricampeón.
Y es justo Momento de la entrega de la Copa Hugo Lima Martinez

La final y el festejo en el lente loco del fútbol 33

El Santo y el Coya calientan motores

La prensa completó las cabinas.
Director de Cultura de la Intendencia y ex jugador de San Lorenzo y mas atrás el espía que vino... del puerto Cancha, verde, fútbol.
La barra varelense alienta. Sale el Coya al campo y posa para su gente

Se viene el santo a buscar el tri. Los de negro y su revisación.
Se mueve se mueve se juega se juega se define se define
El gran ausente, Gatogol Goldaracena con Sergio Arturo Botana, mas conocido como "Sergio Panzardo", ex crack de Peñarol y con un loock golfista. Quintanita, pidiendo, "meta Gravía meta".
Pa la barra del blo´ : miren como sufrio el tipo , ¡no podés!. "Vós no sos normal" como dice Acontramano ja ja ja.
¡Palmas , palmas , palmas!. Atenti: detras de la bandera el tipo sigue...sufriendo , "vos no sos normal"El final, el momento de mayor felicidad.

San Lorenzo, tricampeón

Por Alejandro de León (CEFO - GIEFI)
Terminó el campeonato más largo de la historia del fútbol de Treinta y Tres. 11 meses y 2 días después del inicio, luego de 107 partidos jugados y 396 goles convertidos, que lo transforman además en el torneo de mayor número de partido y de goles de la historia, San Lorenzo se consagró brillantemente tricampeón de la Liga 2006-07-08.
Un campeonato que pasó por mil percances: primero la postergación de los hoy finalistas cuando participaron de la Copa de Clubes de OFI 2008, que no pudieron jugar entresemana porque la comuna no habilitó los escenarios de noche acatando más que rigurosamente las medidas de restricción energética. Luego fue el episodio con la ficha médica de Huracán, luego la Copa de Selecciones y finalmente el no préstamo del Estadio por parte de la Intendnecia en la definición del campeonato. Lo curioso que el hombre fuerte en esta historia con la comuna es el Secretario General de la misma, Washington Collazo, hincha de San Lorenzo y asiduo concurrente al fútbol.
Pero vayamos al partido de hoy. Fue una final vibrante, con clima de final, nada que ver con lo acontecido 20 días atrás en el partido de ida. Sí, 20 días mediaron entre la primera y la segunda final, porque llovieron dos jueves y para el sábado no había cancha y para la segunda final, la comuna tampoco prestó el estadio y se jugó en el Parque Colón, que lucía bastante bien para lo que es su cancha.
Una lástima no contar con imágenes porque el gol del Coya a 10 del comienzo, un auténtico golazo de Darío Tejeira, que la para con el pecho, hace un sombrero se saca dos jugadores de arriba y de volea abre la cuenta. De buena factura también fue el empate a los 25 del primer tiempo, corner que cabecea Darío Vera, pega en el palo y en el rebote Rodrigo Moreira no perdona. Luego, la sucesiva muestra de tarjetas amarillas por la más mínima protesta o por el mínimo roce fue haciendo que el partido se le fuera de las manos al árbitro Luis Carlos Álvarez. Lo apuntaba el Profe Yamandú Sosa desde el comentario en la 45: hay que saber llevar una final, no es sólo a reglamento, si el piso para la amarilla es muy bajo, se corre el riesgo de dejar los cuadros en inferioridad y caldear el ambiente. Y fue lo que pasó, en 2 minutos (37 al 38) se mostraron 5 tarjetas amarillas y una roja.
A los 28' minutos fue expulsado el capitán azulgrana Juan José Mieres, una referencia en la defensa y a los 38' el delantero Martín Ávila también ve la roja. En ambos casos por doble amarilla.
Eso repercutió en el banco santo al extremo que el preparador físico Fabián Sobrera agrediera a puñetazos a Mario Techera, el cuarto árbitro. Fue sacado por la policía, luego vinieron insultos de un parcial del Coya, que fue conversado por el Presidente de la Liga en un gesto que parecía que quería callar a la afición varelense, pero fue sólo por este episodio según nos confirmó el Presidente Fernando Acosta.
Pero por suerte los ingleses, que son capos y por algo inventaron el fútbol y el Uruguay, también inventaron el entretiempo. Y esos 15 minutos mágicos hicieron que para el segundo tiempo los ánimos se aplacaran y el partido volviera a tomar la emoción de una final.
Y tan distinto fue el segundo tiempo que San Lorenzo con dos hombres menos pasó a comandar las acciones. A los 4 minutos del complemento, otra vez luego de un corner viene el gol de San Lorenzo, en una jugada confusa en la que la pelota cruzó toda el área y Mauro Ramírez pretendiendo despejarla la mete en su propia valla.
De ahí en más Barrio Coya perdió la tranquilidad y San Lorenzo se fue adueñando del partido con un gran oficio.
Sobre el final el Coya ya fuera de sí sufrió varias expulsiones. Formidable manejo de San Lorenzo que siempre estuvo en inferioridad y con gran temple dio vuelta un partido que parecía adverso y se quedó con el tricampeonato 2006-2007-2008.